No Más Llorar






A quien corresponda:

“Gracias, por los amaneceres, por los atardeceres, por las alegrías y tristezas, por estar cuándo te necesitaba, por ser tú, por dejarme ser yo, por los abrazos y besos, por el amor, por la historia, por el tiempo, por las cenas, desayunos y almuerzos; por todo.

Aunque tu ausencia duele, trato de  acostumbrarme; ya sé cómo seguir adelante, sin esperar, sin soñar, sin pensar. Es duro saber que no estás, y que no estarás, que ya no seré tuyo y tú mío.

Te amé, te quise, te adoré; gobiernas mis pensamientos.

Adiós.”


Cristian Camilo Vidales Méndez.